Consejo #1: Elige un aire acondicionado de alta eficiencia energética
A la hora de comprar un aparato de aire acondicionado, vale la pena cogerlo de una eficiencia energética de A+ o mayor. Es una inversión que amortizarás desde el primer día y contribuirás, además, al cuidado del medio ambiente.
Consejo #2: Cierra puertas y ventanas
De poco serviría tener trabajando nuestro aire acondicionado si luego la temperatura se escapa al exterior. Asegúrate de que puertas y ventanas están bien cerradas y pregúntate ¿realmente necesitas enfriar toda la casa? El aparato necesita muchísima más energía para que al final casi no nos movamos del salón o las habitaciones.
Consejo #3: Limpia los filtros al menos una vez al año
Si nuestro aparato de aire acondicionado ya tiene un par de años, es imprescindible limpiar los filtros para que funcione correctamente y el sistema sea más eficiente. Los aparatos de aire acondicionado están diseñados para limpiar el aire de polvo y otras partículas.
Pero si no limpiamos los filtros, la calidad del aire empeora y el sistema necesitará más energía para enfriar el aire, además de poder provocar malos olores. Por eso, nosotros siempre recomendamos limpiar los filtros del aire acondicionado al menos una vez al año.
Consejo #4: Elige la potencia del aire de acuerdo a tus necesidades
A veces pensamos que a mayor potencia, mejor. Pues no es así. Si elegimos el aparato acondicionado más potente y lo situamos en una habitación pequeña estaremos consumiendo más energía de la necesaria. Y nuestra factura de la luz lo notará.
Para que el consumo sea eficiente, debemos pensar dónde colocaremos nuestro aparato: Tamaño de la habitación, si le da el sol o no, cuántas personas habitan el espacio, etc.
Consejo #5: Utiliza correctamente el sistema Inverter
El sistema Inverter es una tecnología muy eficiente que te permite ahorrar hasta un 70% con respecto a otros sistemas. En el Inverter, el aire acondicionado va adaptando la potencia según la temperatura que necesitemos, optimizando su consumo.
Ahora bien, si no lo utilizamos correctamente, no servirá de nada. Suele pasar que cuando estamos muy acalorados, bajamos al máximo la temperatura del aire acondicionado para que vaya rápido ¡Grave error! El aire acondicionado estará consumiendo innecesariamente y estaremos desaprovechando la tecnología Inverter. Lo mejor es mantener siempre una temperatura media entre los 23-25 grados.